El reciclaje ha ganado mucha tracción en los Estados Unidos en los últimos 50 años. El primer Día de la Tierra fue el 22 de abril de 1970. Como parte de la celebración, se llevó a cabo un concurso para crear un símbolo que signifique el reciclaje. Gary Anderson, estudiante de la Universidad del Sur de California, ganó. Su diseño, que consta de tres flechas dobladas en forma de triángulo, se ha utilizado desde entonces. Hoy, vemos este símbolo a nuestro alrededor, que nos dice qué productos se han reciclado o pueden ser reciclados o etiquetando una canasta como papelera de reciclaje. Sin embargo, muchos productos que se pueden reciclar fácilmente no lo son.

Quizás parte de la razón detrás de nuestra renuencia a reciclar es que no vemos el problema. Ponemos nuestros contenedores de basura en la acera y los camiones de manejo de desechos se lo llevan. No vemos las pilas acumuladas en el relleno sanitario o las bolsas de plástico flotando en el océano. Residuos reciclaje de neumáticos, por ejemplo, no cobró impulso hasta que las pilas de neumáticos podridos en terrenos baldíos se convirtieron en un recordatorio visual constante del problema. Sin embargo, sabemos que contribuimos al problema a un ritmo alarmante y nuestro exceso de desechos está dañando la vida silvestre.

Hacer que amigos, familiares y vecinos reciclen sus desechos reutilizables puede ser difícil. Hablar con ellos directamente puede llevar a una conversación que suene sermoneadora. Entonces, ¿qué puedes hacer para fomentar el reciclaje? Aquí hay sólo unas pocas ideas:

Poner el ejemplo

Las acciones hablan más que las palabras y, a menudo, se reciben mejor. En lugar de decirles a sus compañeros de trabajo todas las razones por las que deben reducir, reutilizar y reciclar, muéstreles cómo reduce sus desechos. Notarán las pequeñas cosas que haces todos los días. Por lo tanto, traiga su almuerzo en un recipiente reutilizable y use una taza de café de cerámica de su casa en lugar de las tazas aisladas en la sala de descanso. Estas son tareas simples que cualquiera puede adoptar sin mucho trabajo extra.

Hágalo fácil y divertido

Agregar contenedores de reciclaje en lugares convenientes en lugares públicos facilita el reciclaje para todos. Si tiene una lata de refresco vacía en la mano y no hay un contenedor de reciclaje a la vista, ¿cuáles son las posibilidades de que la lata termine en la basura? Puede incentivar aún más el reciclaje haciendo un seguimiento de la cantidad de reciclaje que produce su vecindario u oficina. Mida la cantidad de papel, plástico y papel que se reciclan y avísele a todos. Escuchar que se reciclaron 10 bolsas de botellas de agua de plástico en lugar de enviarlas al vertedero les da a todos una sensación de logro. Cada persona obtiene satisfacción al contribuir a una causa más grande que ellos mismos.

Comparta las ganancias

Algunas empresas de reciclaje pagan las materias primas. Latas de aluminio, botellas de plástico y alambre de cobre son solo algunos ejemplos. Si obtiene ganancias de los esfuerzos de reciclaje de su familia, vecindario u oficina, comparta las recompensas con todos. Quizás eso signifique darles a los niños un poco más de mesada o hacer una fiesta en la calle. Cuando las personas reciben una recompensa por sus esfuerzos, es más probable que sigan adelante y tal vez incluso intensifiquen sus esfuerzos futuros.

En 2017, Energizer se asoció con Coop Norway, una cadena de supermercados, para aumentar el reciclaje de baterías en Noruega. Para hacerlo, colocaron máquinas expendedoras inversas en las tiendas de comestibles de Coop. Las máquinas expendedoras dispensan dinero a cambio de baterías. Los clientes reciben un Krono, o aproximadamente 11 centavos, por batería. Esta recompensa viene en forma de cupón de descuento para baterías de repuesto. En Beijing, máquinas similares emiten créditos para transporte o minutos telefónicos a cambio de botellas de plástico. Estas recompensas son pequeñas, pero brindan otra razón para hacer lo correcto.

Recycle Bank ofrece oportunidades similares a las que reciclan aquí en los Estados Unidos. Si su empresa de gestión de residuos se asocia con Recycle Bank, puede obtener créditos para el reciclaje. Se pueden obtener créditos adicionales en línea completando tareas que le enseñan sobre sostenibilidad. Sus créditos se pueden canjear por cupones o descuentos en minoristas como Amazon y Target.

Reciclaje de intercambio por servicios

En Indonesia, solo el 50-60% de la basura se recolecta y elimina adecuadamente. El resto de la basura se acumula alrededor de las casas y las calles. Vivir entre la suciedad y los desechos no es saludable. Conduce a una mayor incidencia de enfermedades entre la población general. El Dr. Gamal Albinsaid reconoció este problema y comenzó el Seguro Clínico de Basura. Este programa permite a los residentes intercambiar basura por servicios de atención médica. La basura que trae la gente se clasifica. Algunos residuos se compostan y otros elementos se reciclan. Las ganancias obtenidas a través de este proceso se utilizan para pagar la atención médica. Es una situacion donde ambos ganan. Hay menos basura en las calles y más personas tienen acceso a la atención.

Planifica actividades al aire libre

Los estudios han demostrado que aquellos que sienten una conexión con la naturaleza tienen más probabilidades de desear preservarla y protegerla. Planifique una salida con familiares, amigos o compañeros de trabajo para hacer senderismo, acampar, pescar, esquiar o alquilar una cabaña en la montaña para el fin de semana. No importa lo que hagas mientras estés allí. Relájate y disfruta del paisaje.

El reciclaje es fundamental para el futuro de nuestro planeta. En general, hemos logrado un progreso significativo en la limpieza de nuestro acto en las últimas décadas, aunque solo una parte de la población mundial recicla. Convencer a las personas para que participen en programas de reciclaje puede ser más sencillo de lo que cree. Cada uno de nosotros debe hacer su parte para dar un buen ejemplo. Mientras buscamos formas de hacerlo fácil y gratificante para todos, podemos reducir significativamente la cantidad de desechos que producimos.