En 1970, la Ley de Salud y Seguridad Ocupacional sentó las bases para el establecimiento de la Administración de Salud y Seguridad Ocupacional (OSHA). Esta organización tiene el poder de visitar e inspeccionar las instalaciones de trabajo para garantizar que se sigan las reglas y regulaciones que protegen a los empleados. Desde sus inicios, el número de muertes en el lugar de trabajo ha disminuido de 38 por día en 1970 a 14 por día en 2017. Si bien esta reducción es admirable, las lesiones y muertes en el lugar de trabajo todavía ocurren con más frecuencia de lo que deberían.

Como ocurre con muchas otras industrias, el caucho plantas de reciclaje peligros inherentemente presentes para los empleados. Es responsabilidad de los propietarios de las instalaciones comprender el potencial dañino de los equipos, materiales y procesos y abordarlos de manera proactiva. Al identificar los peligros y proporcionar a los empleados la capacitación y el equipo adecuados, pueden mitigar los riesgos y evitar accidentes y lesiones.

Vehículos en movimiento

Las plantas de reciclaje recolectan llantas de desecho de las tiendas de llantas y sitios de limpieza de muchas millas a la redonda. Estos envíos de llantas pesadas llegan en camiones grandes. Debido a su gran peso y tamaño, deben descargarse y transportarse a través de la instalación utilizando montacargas y otros equipos pesados. Una vez procesado, el producto terminado, ya sea sin cables mantillo o agregado derivado de neumáticos, se embolsa y se envía a los clientes. Todo este movimiento equivale a una gran cantidad de vehículos pesados ​​que se mueven regularmente por la instalación de reciclaje.

Puede ser un desafío rastrear a las personas cuando se conduce un camión grande o un montacargas. Mantener a los empleados seguros requiere establecer protocolos y procedimientos para que los vehículos y las personas se crucen en los caminos solo cuando sea necesario. Además, la instalación de maquinaria con alarmas de marcha atrás y luces delanteras proporciona una advertencia adicional a los que van a pie, lo que les permite mantenerse alejados del camino de los vehículos.

Daño en el oido

Un estudio de las condiciones en las plantas de reciclaje de caucho realizado en 2003 concluyó que los niveles de ruido eran una preocupación importante. La maquinaria pesada genera mucho ruido al triturar y cortar neumáticos de automóviles y camiones. El ruido generado por estas máquinas osciló entre 85 y 100 dBA. A modo de comparación, una conversación normal suele rondar los 60 dBA y una motocicleta funciona a unos 95 dBA. Según los Centros para el Control de Enfermedades (CDC), la exposición prolongada a ruidos superiores a 70 dBA es suficiente para causar daño auditivo.

Sin embargo, mitigar la exposición de los empleados es sencillo. Los empleadores deben proporcionar protección auditiva a quienes trabajen en o cerca de equipos ruidosos. Los empleados que lleven dicho equipo también deben tomar precauciones para estar al tanto de los peligros potenciales a su alrededor, ya que no escucharán las advertencias auditivas.

Irritantes en el aire

El reciclaje de neumáticos de caucho crea inevitablemente polvo de caucho. Estas partículas finas representan una doble amenaza. Primero, son un peligro de inhalación. Todos los empleados deben tener acceso a máscaras o respiradores para eliminar la probabilidad de respirar estas partículas tóxicas.

En segundo lugar, la acumulación de polvo de caucho dentro de la maquinaria y en las superficies de la instalación puede aumentar la fricción y el calor. Este desgaste adicional es duro para las piezas mecánicas, provocando un desgaste excesivo. También puede ser la fuente de una chispa, encendiendo este polvo altamente inflamable provocando un incendio o una explosión.

La eliminación regular de polvo de caucho de superficies, conductos y maquinaria debe ser parte de una rutina de limpieza para mantener la seguridad dentro de la planta de reciclaje. Debido a que el polvo en sí mismo puede generar electricidad estática, es esencial utilizar métodos de limpieza que no hagan que el polvo vuele por el aire. Algunas opciones aceptables incluyen:

  • Aspirar el polvo de las superficies
  • Soplar partículas de superficies usando aire comprimido a menos de 30 psi para evitar la creación de grandes nubes de polvo de goma.
  • Cepillar los escombros con escobas o raspadores de acero o aluminio para minimizar las chispas estáticas

Peligro de incendio

Los neumáticos de goma para automóviles y camiones son un peligro de incendio bien conocido. A medida que aumenta la temperatura interna de una pila de caucho, se vuelve cada vez más difícil de enfriar. Si alcanza un cierto umbral de temperatura, el enfriamiento se vuelve casi imposible y el fuego se vuelve inevitable. Los incendios de neumáticos son tóxicos y difíciles de extinguir. Por esta razón, las autoridades estatales y locales establecen pautas y requisitos para el transporte y almacenamiento de llantas para minimizar los riesgos de un incendio.

Es esencial consultar con las autoridades locales en su área las reglas y regulaciones para prevenir incendios de llantas. Esté preparado para cumplir requisitos como los siguientes:

  • Almacene las llantas al menos a 20-50 pies de cualquier edificio.
  • Controle periódicamente la temperatura de los neumáticos almacenados. La temperatura a 6 pies de profundidad no debe exceder los 120 ° F.
  • Limite el tamaño de la pila a pilas de 2,500-5,000 pies cuadrados y deje espacio entre las pilas de neumáticos para que las llamas no se propaguen de una pila a otra.
  • Cree un sistema de rotación que no permita que los neumáticos se asienten y se pudran en un lugar durante períodos prolongados.

Partes móviles

Maquinaria como cintas transportadoras, trituradoras primarias y trituradoras tienen partes móviles capaces de causar lesiones graves. Los empleados deben ser conscientes de la posibilidad de lesiones y siempre deben permanecer alerta cuando trabajen cerca de estas máquinas.

Incluso los mejores equipo de corte de llantas se descompone de vez en cuando. Las reparaciones y el mantenimiento son una parte esperada del reciclaje de neumáticos. En algún momento, los mecánicos deberán abrir el equipo para rotar los cuchillos trituradores o afilar las cuchillas. Tener un procedimiento de bloqueo / etiquetado bien establecido es vital para prevenir lesiones durante el mantenimiento y las reparaciones. La maquinaria que cobra vida en el momento equivocado podría ser la causa de una lesión importante.

El reciclaje de llantas se está convirtiendo rápidamente en una parte vital de nuestra economía, tomando llantas de caucho de desecho y transformándolas en productos de valor agregado para su uso en diferentes industrias. Operar una instalación segura requiere educar a los empleados sobre las mejores prácticas de seguridad y brindarles las herramientas para protegerse. La mayoría de los accidentes se pueden evitar con la preparación adecuada y los pasos preventivos establecidos.